El gobernador de Nariño, Camilo Romero, aprovechó una reunión con el presidente Juan Manuel Santos para rechazar la investigación de la Fiscalía en su contra, por supuestas irregularidades en la venta de licores en el departamento.
Asegura que hay intereses particulares detrás de la actuación del fiscal Néstor Humberto Martínez.
“Lo que cada vez tiene más claro la opinión pública en Colombia es que si hay alguien de bolsillo es el fiscal General”, manifestó Romero.
Considera que hay una persecución en contra de varios políticos y cuestionó quien se podría beneficiar con estas decisiones.
“Quiero hacer un llamado de reflexión, lo que pasó hace una semana con Sergio Fajardo en Antioquia, lo que ha pasado con Gustavo Petro, ¿qué intereses hay detrás de todo esto? ¿perseguir algunas alternativas políticas en Colombia?”, señaló.
El gobernador Romero aseguró que está dispuesto a aclarar y demostrar que el proceso de comercialización de Aguardiente Nariño, por el cual la Fiscalía le abrió una investigación en mayo pasado se hizo de manera legal.
La investigación está relacionada con la venta de 80.000 cajas de Aguardiente Nariño a la organizacion de licoristas de Nariño S.A.S. en agosto de 2016 previa expedición de un decreto que fijaba los precios y escalas de venta del licor.
Las dudas en este proceso están en la rapidez con la que se adjudicó el contrato a una firma constituida en el 2015, y los tiempos desde la expedición del decreto, proceso del que quedaron por fuera los antiguos compradores.
Asegura que hay intereses particulares detrás de la actuación del fiscal Néstor Humberto Martínez.
“Lo que cada vez tiene más claro la opinión pública en Colombia es que si hay alguien de bolsillo es el fiscal General”, manifestó Romero.
Considera que hay una persecución en contra de varios políticos y cuestionó quien se podría beneficiar con estas decisiones.
“Quiero hacer un llamado de reflexión, lo que pasó hace una semana con Sergio Fajardo en Antioquia, lo que ha pasado con Gustavo Petro, ¿qué intereses hay detrás de todo esto? ¿perseguir algunas alternativas políticas en Colombia?”, señaló.
El gobernador Romero aseguró que está dispuesto a aclarar y demostrar que el proceso de comercialización de Aguardiente Nariño, por el cual la Fiscalía le abrió una investigación en mayo pasado se hizo de manera legal.
La investigación está relacionada con la venta de 80.000 cajas de Aguardiente Nariño a la organizacion de licoristas de Nariño S.A.S. en agosto de 2016 previa expedición de un decreto que fijaba los precios y escalas de venta del licor.
Las dudas en este proceso están en la rapidez con la que se adjudicó el contrato a una firma constituida en el 2015, y los tiempos desde la expedición del decreto, proceso del que quedaron por fuera los antiguos compradores.
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