LA CPI ABSUELVE AL EX VICEPRESIDENTE DEL CONGO, JEAN-PIERRE BEMBA, Y REVIERTE SU CONDENA
El ex vicepresidente de la República Democrática del Congo, Jean-Pierre Bemba, queda absuelto de los cargos de crímenes de guerra y de lesa humanidad que se le habían imputaba durante los últimos años por su rol como líder del Movimiento para la Liberación del Congo (MLC). Ya no tendrá que pasar en prisión los 18 años a los que fue condenado en 2016 por no haber controlado y vigilado a sus hombres, y por no haber evitado los terribles crímenes que se estaban cometiendo contra la población civil en la República Centroafricana (RCA). En contra de lo dictado la Justicia internacional al principio, los magistrados concluyeron este viernes que Bemba no era consciente de las acciones de sus hombres en ese país y que cuando lo supo, actuó para evitarlo.
La Corte Penal Internacional (CPI) revocó la condena a Bemba, polémico político e hijo de un prominente empresario congoleño, y le absolvió de toda su responsabilidad en las matanzas, las torturas y las horrendas violaciones cometidas por un millar de sus hombres, militares del MLC, un grupo rebelde que él mismo fundó con el apoyo logístico y económico de Uganda. Bemba los envió a la RCA entre 2002 y 2003 para evitar un golpe de Estado contra el entonces presidente de ese país, Ange Felix Patasse.
En la resolución del recurso, la CPI argumentó que este ex político fue condenado por "actos delictivos que estaban fuera de los cargos confirmados" por las pruebas y los testigos. El ex vicepresidente del Congo "no puede ser penalmente responsable" por los crímenes cometidos por las tropas del MLC y, sin duda, "debe ser absuelto" de inmediato. La Sala de Apelación también reprendió a la de Primera Instancia, a la que acusó de cometer "graves errores en su conclusión de que Bemba no había tomado todas las medidas necesarias y razonables para prevenir los crímenes" de sus hombres en la RCA.
Sus tropas violentaron a la población civil, pero eso no le hace a él un criminal de guerra, concluyeron. "Se ha ignorado una evidencia testimonial determinante y es que la capacidad que tenía Bemba para investigar y castigar los crímenes que tenían lugar en la República Centroafricana era limitada", explicó la jueza belga Christine Van Den Wyngaert, que le notificó la absolución.
Los jueces consideraron que la sentencia revocada era muy genérica, "errónea" y no tenía en cuenta algunos "esfuerzos" de Bemba de detener los crímenes que se habían estado cometiendo en la RCA. Para los magistrados del recurso, este congoleño sí intentó frenar las violaciones y los asesinatos en el momento en el que "supo" la realidad de lo que estaba ocurriendo bajo su mandato. Esta absolución es definitiva y no cabe recurso contra la misma, según subrayó la propia Corte.
La condena en primera estancia de 2016 había sido recibido muy aplaudida por parte de los expertos en derecho internacional. Era una sentencia sin precedentes y, quizás, una de las más importantes de la historia del CPI desde la fundación de esta institución en 2002. Era la primera vez que el tribunal de La Haya tenía en cuenta la violación como arma de guerra y que condenaba a un líder por los crímenes que otros había cometido bajo su dirección.
Bemba dejó el Congo y huyó a Bélgica en 2007, donde fue detenido un año después y entregado a la CPI en respuesta a una orden de busca y captura internacional que le señalaba como cabecilla de todo lo ocurrido en el país africano y por ende como responsable de los crímenes. Lleva ya una década compartiendo la prisión internacional de Scheveningen, en La Haya, con otros conocidos criminales de guerra como el serbobosnia Ratko Mladi, que cumple cadena perpetua por genocidio.
A pesar de esta absolución, Bemba permanecerá entre rejas al menos hasta el próximo martes 12 de junio, fecha en la que la corte decidirá si le mantiene detenido o espera a que el tribunal se pronuncie por otra causa pendiente por delitos por delitos contra la administración de la Justicia, después de que el congoleño intentara sobornar a los testigos durante su principal juicio. Les llegó a pedir que ofrezcan falsos testimonios que permitieran su absolución, la misma que consiguió este viernes en apelación.
La decisión de la CPI no gustará nada a las víctimas del MLC, aunque fue recibida con gritos de alegría por parte de sus más fieles seguidores, que escucharon el veredicto desde la cristalera que les separa de la sala del tribunal. Bemba tiene ahora derecho a pedir una indemnización a la Corte por el tiempo que ha estado en detención si sus abogados son capaces de argumentar que el encarcelamiento ha sido "un grave error".
Tomada de: El Mundo
La Corte Penal Internacional (CPI) revocó la condena a Bemba, polémico político e hijo de un prominente empresario congoleño, y le absolvió de toda su responsabilidad en las matanzas, las torturas y las horrendas violaciones cometidas por un millar de sus hombres, militares del MLC, un grupo rebelde que él mismo fundó con el apoyo logístico y económico de Uganda. Bemba los envió a la RCA entre 2002 y 2003 para evitar un golpe de Estado contra el entonces presidente de ese país, Ange Felix Patasse.
En la resolución del recurso, la CPI argumentó que este ex político fue condenado por "actos delictivos que estaban fuera de los cargos confirmados" por las pruebas y los testigos. El ex vicepresidente del Congo "no puede ser penalmente responsable" por los crímenes cometidos por las tropas del MLC y, sin duda, "debe ser absuelto" de inmediato. La Sala de Apelación también reprendió a la de Primera Instancia, a la que acusó de cometer "graves errores en su conclusión de que Bemba no había tomado todas las medidas necesarias y razonables para prevenir los crímenes" de sus hombres en la RCA.
Sus tropas violentaron a la población civil, pero eso no le hace a él un criminal de guerra, concluyeron. "Se ha ignorado una evidencia testimonial determinante y es que la capacidad que tenía Bemba para investigar y castigar los crímenes que tenían lugar en la República Centroafricana era limitada", explicó la jueza belga Christine Van Den Wyngaert, que le notificó la absolución.
Los jueces consideraron que la sentencia revocada era muy genérica, "errónea" y no tenía en cuenta algunos "esfuerzos" de Bemba de detener los crímenes que se habían estado cometiendo en la RCA. Para los magistrados del recurso, este congoleño sí intentó frenar las violaciones y los asesinatos en el momento en el que "supo" la realidad de lo que estaba ocurriendo bajo su mandato. Esta absolución es definitiva y no cabe recurso contra la misma, según subrayó la propia Corte.
La condena en primera estancia de 2016 había sido recibido muy aplaudida por parte de los expertos en derecho internacional. Era una sentencia sin precedentes y, quizás, una de las más importantes de la historia del CPI desde la fundación de esta institución en 2002. Era la primera vez que el tribunal de La Haya tenía en cuenta la violación como arma de guerra y que condenaba a un líder por los crímenes que otros había cometido bajo su dirección.
Bemba dejó el Congo y huyó a Bélgica en 2007, donde fue detenido un año después y entregado a la CPI en respuesta a una orden de busca y captura internacional que le señalaba como cabecilla de todo lo ocurrido en el país africano y por ende como responsable de los crímenes. Lleva ya una década compartiendo la prisión internacional de Scheveningen, en La Haya, con otros conocidos criminales de guerra como el serbobosnia Ratko Mladi, que cumple cadena perpetua por genocidio.
A pesar de esta absolución, Bemba permanecerá entre rejas al menos hasta el próximo martes 12 de junio, fecha en la que la corte decidirá si le mantiene detenido o espera a que el tribunal se pronuncie por otra causa pendiente por delitos por delitos contra la administración de la Justicia, después de que el congoleño intentara sobornar a los testigos durante su principal juicio. Les llegó a pedir que ofrezcan falsos testimonios que permitieran su absolución, la misma que consiguió este viernes en apelación.
La decisión de la CPI no gustará nada a las víctimas del MLC, aunque fue recibida con gritos de alegría por parte de sus más fieles seguidores, que escucharon el veredicto desde la cristalera que les separa de la sala del tribunal. Bemba tiene ahora derecho a pedir una indemnización a la Corte por el tiempo que ha estado en detención si sus abogados son capaces de argumentar que el encarcelamiento ha sido "un grave error".
Tomada de: El Mundo
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