El pasado domingo 1 de julio, con una victoria arrolladora, el político y escritor Andrés Manuel López Obrador ganó las elecciones presidenciales en México, según los datos preliminares, con un 53 % de los votos.
El candidato de la coalición ´Juntos Haremos Historia´ ha prometido una fuerte oposición a cualquier represión estadounidense con respecto a la migración. El pasado Lunes, López Obrador mantuvo una llamada telefónica de 30 minutos con el presidente Donald Trump en la cual le propuso “explorar un acuerdo integral; de proyectos de desarrollo que generen empleos en México, y con ello, reducir la tasa de migración y mejorar la seguridad” , menciono López Obrador en su cuenta de twitter.
Este triunfo implica un cambio radical en el mapa político en los 32 estados del país y que hasta ahora eran gobernados mayoritariamente por una alternancia de las bancadas tradicionales, el oficialista Partido Revolucionario Institucional y el conservador Partido Acción Nacional.
Seguido de su triunfo, Andrés López Obrador prometió cambiar la actual estrategia militar para combatir los cárteles de drogas y violencia. En su primer mensaje tras conocerse los resultados oficiales dijo, “ más que el uso de la fuerza atenderemos las causas que originan la inseguridad”.
Por su parte, la mexicana Alin Armendariz Directora Ejecutiva Adjunta de Atención a Clientes en CENAGAS, quien no votó por el candidato de Morena, aseguró que “tanto la victoria de López Obrador como el discurso conciliador que dio después, dan cuenta de que tiene todo para ser un excelente presidente y que si todas las cosas se unen podría aprovecharse como un momento histórico para que México llegue a ser un gran país”.
Por otra parte, la jornada electoral no estuvo libre de violencia. La prensa local en diversos estados documentó al menos tres muertos, tomas de casillas, vandalismo, compra de votos, vandalismo en casas de campañas, disparos al aire, enfrentamientos a golpes y quema de llantas.
El candidato de la coalición ´Juntos Haremos Historia´ ha prometido una fuerte oposición a cualquier represión estadounidense con respecto a la migración. El pasado Lunes, López Obrador mantuvo una llamada telefónica de 30 minutos con el presidente Donald Trump en la cual le propuso “explorar un acuerdo integral; de proyectos de desarrollo que generen empleos en México, y con ello, reducir la tasa de migración y mejorar la seguridad” , menciono López Obrador en su cuenta de twitter.
Este triunfo implica un cambio radical en el mapa político en los 32 estados del país y que hasta ahora eran gobernados mayoritariamente por una alternancia de las bancadas tradicionales, el oficialista Partido Revolucionario Institucional y el conservador Partido Acción Nacional.
Seguido de su triunfo, Andrés López Obrador prometió cambiar la actual estrategia militar para combatir los cárteles de drogas y violencia. En su primer mensaje tras conocerse los resultados oficiales dijo, “ más que el uso de la fuerza atenderemos las causas que originan la inseguridad”.
Por su parte, la mexicana Alin Armendariz Directora Ejecutiva Adjunta de Atención a Clientes en CENAGAS, quien no votó por el candidato de Morena, aseguró que “tanto la victoria de López Obrador como el discurso conciliador que dio después, dan cuenta de que tiene todo para ser un excelente presidente y que si todas las cosas se unen podría aprovecharse como un momento histórico para que México llegue a ser un gran país”.
Por otra parte, la jornada electoral no estuvo libre de violencia. La prensa local en diversos estados documentó al menos tres muertos, tomas de casillas, vandalismo, compra de votos, vandalismo en casas de campañas, disparos al aire, enfrentamientos a golpes y quema de llantas.
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