“SOMOS TILDADOS DE CORRUPTOS Y LADRONES”: EL TÍTULO QUE DEJA LA CRISIS EN LA JUSTICIA A ESTUDIANTES DE DERECHO
Según el Ministerio de Educación Nacional, en 2016, 262.516 estudiantes formalizaron su matrícula en primer curso del programa Derecho y afines en las universidades del país. Esto piensan de los escándalos que se viven en las altas cortes.
Colombia es el segundo país en el mundo con más abogados. La cifra puede sorprender, más aún en un momento en el que la justicia pasa por tiempos difíciles. Las revelaciones del ex fiscal anticorrupción, Gustavo Moreno, dieron paso al hoy conocido escándalo del cartel de la toga. Pero no es lo único. El país tiene más de 400 jueces investigados.
La carrera de derecho es quizás una de las más populares del país. Según la Corporación de Excelencia en la Justicia, CEJ, mientras que en 2007 había 72 programas, la cifra hoy asciende a 188, lo que significa un aumento de 81 por ciento en el número de abogados en los últimos 10 años. De todos estos, solo 39 tienen acreditación de alta calidad.
Sin embargo, esta proliferación de programas no ha abierto un debate a fondo y con acciones acerca de los estándares de calidad que se deberían tener para la apertura y oferta de esta carrera.
La crisis de la justicia no ha afectado esos números, pero si la percepción de lo que significa estudiar derecho. “No se puede generar una relación directa entre egresados de programas de Derecho y afines y crisis de la justicia, pues la mayoría de los involucrados en los escándalos de togados y jueces son egresados de universidades de gran trayectoria y con alto reconocimiento en el país”, afirma el decano de la facultad de derecho y ciencias políticas de la Universidad de Antioquia Luquegui Gil Neira
Los estudiantes aseguran que ser abogado hoy en Colombia no es tarea fácil, “primero por la competencia, somos muchos los abogados en Colombia y segundo porque somos tildados de ladrones y corruptos”, afirma María Fernanda Ortiz, estudiante de Derecho de la Universidad de Antioquia.
La crisis moral de la justicia que vive la Nación por cuenta de los actos ilícitos de magistrados, jueces y abogados hacen que el ejercicio judicial se vea como transacciones de favores políticos y dinero, lo que deja en evidencia que “la justicia en parte se ha vuelto un mercado, muchos funcionarios llegan a las altas instituciones no por méritos y conocimientos sino por un favor o porque pasan dinero por debajo y así también son favorecidos” opina Isabel Restrepo, estudiante de noveno semestre de la UdeA.
Rubén Lugo, profesor de derecho procesal de la Corporación Universitaria Americana, asegura que “es vergonzoso y triste tener que dar una clase de Derecho en estas condiciones, en una clase ofrecí disculpas a mis estudiantes por todo lo que se estaba destapando, no podía dar la clase así, me daba pena la verdad” reconoce
La preparación profesional se hace requisito indispensable para impartir justicia pero no es suficiente para un buen ejercicio “los abogados deben ser más educados, no sólo un doctorado te hace educado sino educarse en valores y moral, esa es una de las soluciones a la corrupción que estamos viviendo hoy” concluye Alejandra López, estudiante de derecho de la UdeA.
Colombia es el segundo país en el mundo con más abogados. La cifra puede sorprender, más aún en un momento en el que la justicia pasa por tiempos difíciles. Las revelaciones del ex fiscal anticorrupción, Gustavo Moreno, dieron paso al hoy conocido escándalo del cartel de la toga. Pero no es lo único. El país tiene más de 400 jueces investigados.
La carrera de derecho es quizás una de las más populares del país. Según la Corporación de Excelencia en la Justicia, CEJ, mientras que en 2007 había 72 programas, la cifra hoy asciende a 188, lo que significa un aumento de 81 por ciento en el número de abogados en los últimos 10 años. De todos estos, solo 39 tienen acreditación de alta calidad.
Sin embargo, esta proliferación de programas no ha abierto un debate a fondo y con acciones acerca de los estándares de calidad que se deberían tener para la apertura y oferta de esta carrera.
La crisis de la justicia no ha afectado esos números, pero si la percepción de lo que significa estudiar derecho. “No se puede generar una relación directa entre egresados de programas de Derecho y afines y crisis de la justicia, pues la mayoría de los involucrados en los escándalos de togados y jueces son egresados de universidades de gran trayectoria y con alto reconocimiento en el país”, afirma el decano de la facultad de derecho y ciencias políticas de la Universidad de Antioquia Luquegui Gil Neira
Los estudiantes aseguran que ser abogado hoy en Colombia no es tarea fácil, “primero por la competencia, somos muchos los abogados en Colombia y segundo porque somos tildados de ladrones y corruptos”, afirma María Fernanda Ortiz, estudiante de Derecho de la Universidad de Antioquia.
La crisis moral de la justicia que vive la Nación por cuenta de los actos ilícitos de magistrados, jueces y abogados hacen que el ejercicio judicial se vea como transacciones de favores políticos y dinero, lo que deja en evidencia que “la justicia en parte se ha vuelto un mercado, muchos funcionarios llegan a las altas instituciones no por méritos y conocimientos sino por un favor o porque pasan dinero por debajo y así también son favorecidos” opina Isabel Restrepo, estudiante de noveno semestre de la UdeA.
Rubén Lugo, profesor de derecho procesal de la Corporación Universitaria Americana, asegura que “es vergonzoso y triste tener que dar una clase de Derecho en estas condiciones, en una clase ofrecí disculpas a mis estudiantes por todo lo que se estaba destapando, no podía dar la clase así, me daba pena la verdad” reconoce
La preparación profesional se hace requisito indispensable para impartir justicia pero no es suficiente para un buen ejercicio “los abogados deben ser más educados, no sólo un doctorado te hace educado sino educarse en valores y moral, esa es una de las soluciones a la corrupción que estamos viviendo hoy” concluye Alejandra López, estudiante de derecho de la UdeA.
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